Diego Zúñiga nació en Costa Rica.

Creció en un hogar de padres divorciados, distante a la iglesia y debido a conflictos religiosos entre católicos y evangélicos, en su adolescencia, empezó a dejar de lado la fe que tenía, hasta llegar a pensar que el cristianismo no valía la pena.

A sus 17 años se trasladó de la provincia de Cartago a la capital, donde inició sus estudios universitarios. Estando ahí, comenzó a tomar licor, fumar marihuana y vivir en un ambiente nocivo.

En su último año de universidad, Diego conoció a una estadounidense que desarrollaba un programa con niños y jóvenes. Decidió hacer un voluntariado con ellos trasladándose al cantón de Parrita, donde conoció jóvenes con necesidades emocionales y de conducta.

Durante el programa conoció a Dixon, con quien se identificó al escuchar su historia personal, debido a que tenía un estilo de vida similar a la que él llevaba. Dixon le comentó que quería vivir de manera diferente y deseaba que Dios transformara su vida. Esto impactó a Diego y lo motivó a hacer un cambio para poder ayudar a estos jóvenes.

Una noche decidió asistir a una reunión de la ONG donde hacía el voluntariado, y estando allí observó desde una esquina de la habitación a las personas levantando sus manos y adorando a Dios, lo que le hizo sentirse incómodo. De pronto, un calor invadió su corazón y empezó a sentir emociones que no lograba comprender. Diego lloraba, pero a la vez sentía alegría. El líder de la reunión notó lo que ocurría y conversando con él le explicó que había recibido al Espíritu Santo.

Tiempo después, Dixon lo invitó a la iglesia Pura Vida Church donde conoció al Pastor Dennis León. En este lugar se sintió feliz y comenzó a congregarse, a leer la Biblia y a desarrollar una relación íntima con Jesús. Fue inevitable para él comprender el propósito de Dios en su vida. Esto lo llevó a decidir quedarse a vivir en Parrita, renunciando a su trabajo, a estar cerca de su familia, y a los planes que, en aquel entonces, deseaba emprender.

Tres años después, inició un grupo de estudio bíblico que se llamaba Worship. El pastor Dennis lo motivaba diciendo: -Este grupo se ha convertido en una iglesia- y le instaba continuamente a su llamado pastoral, pero Diego se negaba a aceptarlo.

En el 2020, Dios trabajó nuevamente en su corazón, haciéndole comprender con claridad su llamado pastoral. En el 2021, formó la iglesia Home Church, la cual se localiza en Parrita y pertenece al Distrito 360.

Actualmente, Diego pastorea esta iglesia y lidera tres casas de paz. El Señor ha sido fiel, continúa cumpliendo Su propósito y bendiciendo la vida de muchos jóvenes a través de su servicio.